5/22/2007



Texto escrito por Pablo Neruda:


Oda a César Vallejo

A la piedra en tu rostro,
Vallejo,
a las arrugas
de las áridas sierras
yo recuerdo en mi canto,
tu frente
gigantesca
sobre tu cuerpo frágil,
el crepúsculo negro
en tus ojos
recién desenterrados,
días aquellos,
bruscos,
desiguales,
cada hora tenía
ácidos diferentes
o ternuras
remotas,
las llaves de la vida
temblaban
en la luz polvorienta
de la calle,
tú volvías
de un viaje lento, bajo la tierra,
y en la altura
de las cicatrizadas cordilleras
yo golpeaba tus puertas,
que se abrieran
los muros,
que se desarrollaran
los caminos
recién llegado de Valparaíso
me embarcaba en Marsella,
la tierra
se cortaba
como un limón fragante
en frescos hemisferios amarillos,
tú te quedabas allí,
sujeto a nada,
con tu vida
y tu muerte,
con tu arena cayendo, midiéndote
y vaciándote,
en el aire,
en el humo,
en las calles rotas del invierno.
Era en París, vivías
en los descalabrados hoteles de los pobres.
España
se desangraba.
Acudíamos.
Y luego
te quedaste
otra vez en el humo
así cuando
ya no fuiste, de pronto,
no fue la tierra
de las cicatrices,
la piedra andina
la que tuvo tus huesos, sino el humo,
la escarcha
de París en invierno.
Dos veces desterrado,
hermano mío
de la tierra y el aire,
la vida y la muerte
desterrado
del Perú, de tus ríos,
ausente
de tu arcilla.
No me faltaste en la vida,
sino en muerte.
Te busco
gota a gota,
polvo a polvo,
en tu tierra,
amarillo
en tu rostro,
escarpado es tu rostro,
estás lleno
de viejas pedrerías,
de vasijas
quebradas,
subo
las antiguas escalinatas,
tal vez
estés perdido,
enredado
entre los hilos de oro,
cubiertode turquesas,
silencioso,
o tal vez
en tu pueblo,
en tu raza,
grano
de maíz extendido,
semilla
de bandera.
Tal vez, tal vez ahora
transmigres
y regreses,
vienes
al fin
de viaje,
de madera
que un día
te verás en el centro
de tu patria,
insurrecto,
viviente,
cristal de tu cristal, fuego en tu fuego,
rayo de piedra púrpura.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Vallejo.

Gracias.